miércoles, 6 de junio de 2018

Dato Curioso: La inspiración de Masami Kurumada en Ashita No Joe.


Ashita No Joe es un anime de culto, el cual fue de gran inspiración para la juventud japonesa en esos tiempos. El impacto que dio la historia de Joe Yabuki fue tanto que fue de gran inspiración para la creación de varias series.

El ejemplo más claro es el manga llamado “Hajime no Ippo” el cual sigue siendo publicado hasta la actualidad, de hecho el mismo autor lo ha confirmado en alguna que otra entrevista.

Viendo ambas series puedes notar como Jyoji Morikawa se inspiró bastante en ciertos conceptos de Ashita no Joe (Si quieren que me extienda sobre la relación entre ambas series de boxeo en una entrada, solamente pídanlo en los comentarios).

Pero para mi sorpresa, mi serie favorita fue de inspiración para las obras del conocido autor Masami Kurumada.



Si eres de ese tipo de persona que le aterran los spoilers... pues será mejor que leas está corta entrada, tras ver las tres series involucradas.

Siendo más preciso con sus obras más conocidas: Ring ni kakero y Saint Seiya.


Kurumada para crear una de sus obras más populares (Ring ni Kakero) se basó mucho en Ashita no Joe, uno de sus obras favoritas por cierto.

La idea original de Masami Kurumada era crear un manga que fuera un homenaje a esta serie, sin embargo mientras más avanzaba su nuevo producto comenzó a tener un estilo propio, lo cual fue clave para su popularidad en Japón.

El drama y las bases del boxeo seguían en esta obra, pero comenzaba a destacar más por sus combates que cada vez se volvían más exagerados y los personajes realizaban golpes más ficticios (Convirtiéndose en un modelo para futuras obras del género shonen).


De hecho muchas cosas que utilizó Kurumada en esta obra fueron las bases para crear su manga más popular: Saint Seiya. 


Según el mismo Kurumada: Nunca fue capaz de superar a Joe, razón por la cual quiso crear su propio manga de boxeo.

Sin Ashita no Joe, no hubiera Ring ni Kakero y sin este, no tendríamos Saint Seiya.


Pero volviendo con la obra de boxeo de Kurumada:

En su primera versión resalta más el drama como había mencionado anteriormente, además de que el protagonista tenía que aprender todo sobre el boxeo… cosas que fueron quitadas en la re-impresión del manga en el ya lejano 2001 enfocándose más en la “atracción principal” de su obra.

Supongo que debió ver esas escenas innecesarias para el enfoque que le dio al final a este manga.

Con esto ya podría dar por finalizada está entrada, sin embargo al buscar más sobre esta obra y leerme el manga de Saint Seiya pude encontrar otras semejanzas.

El final de cada obra.


No daré muchos detalles de lo sucedido en la trama de estas series, pero en sí ambos protagonistas de las obras del señor Kurumada acaban de la misma forma que Joe Yabuki.

Muertos.

Joe Yabuki muere en el ring, no sin antes arder como nunca antes lo había hecho… en la escena final de esta serie solamente vemos las cenizas que quedan del protagonista. 

Uno de los mejores combates que he visto en algún anime.
El contexto y la rivalidad que tenían ambos boxeadores son completamente diferentes en Ring Ni Kakero 1 (Ya que años más tarde se crearía una secuela con un nuevo protagonista), pero nuevamente el protagonista lucha con todo lo que tiene… dejándonos con una escena algo similar a la anterior.


Este manga es de los más complicados de encontrar por estas partes del mundo, por lo menos pude encontrar el final "animado" en youtube gracias a su versión Pachinko.
Y no podíamos dejar de lado a la icónica escena protagonizada por Seiya de Pegaso en la saga de Hades, en donde por fin lográ lastimar al dios del inframundo y proteger a su diosa de un ataque mortal.


Cayendo él en combate pero dándole la voluntad necesaria a sus hermanos, para acabar con su adversario.

Vamos Kurumada, se que podías crear algo más emotivo.

Por último pero no menos importante, está cierta escena exclusiva del manga de Saint Seiya siendo más preciso en el tomo 8.

Antes de partir al santuario Seiya tiene una conversación con su amiga de la infancia Miho, en donde el protagonista dice cosas bastante interesantes.



Miho menciona que siente lastima por Seiya y sus hermanos, ya que su vida se resume en luchar y recibir innumerables heridas mientras los demás chicos de su edad disfrutan de su juventud. Pero Seiya le dice que ellos son muy diferentes al resto, dando un discurso que sinceramente no me lo esperaba de un personaje tan simple como él.

Lo único que me desagrada de esta parte del manga es que relacionan todo con el destino, el que tu papel en el mundo esté escrito me parece un recurso narrativo bastante aburrido además de mediocre.

Pero ya habrá tiempo de hablar sobre ello en el futuro.

Lo que quiero resaltar de esa escena es que esa conversación llega a ese punto por la comparación que hace Miho entre la vida de Seiya y los demás chicos de su edad.

Tras eso, se nos entrega algo más de profundidad por parte de Seiya y por qué decide ir al santuario, no es simplemente por hacer lo correcto o por serle leal a su diosa.

¿Saben en donde más ocurre una escena similar?

Así es, en Ashita no Joe.

El escenario es muy similar al mostrado anteriormente, siendo más precisos en el episodio 14 de la segunda temporada.

―¿No te sientes a veces solo, Yabuki-kun? Otros chicos de tu edad salen a fiestas en grupo o con chicas… aprovechan y disfrutan su juventud… mientras que tú, gastas todo tu tiempo en un gimnasio sombrío que huele a vaselina y resina sin cesar, saltando la cuerda, ejercitando tus músculos o dándole al saco.



―Cuando estás en el ring, ahí peleas como un perro rabioso hasta que acabas cubierto de sangre. Ni siquiera puedes beber o comer lo que quieras, sacrificándote continuamente por mantener tu peso… ¡Es una vida patética y miserable! ¡Es demasiado triste, desaprovechas tu juventud!


―Nori-chan, quizás antes se me olvidó decirte algo… yo… no solo boxeo porque me sienta obligado o culpable de lo que le he hecho a otros, sino también, porque me gusta. 


Quisiera seguir escribiendo los diálogos en donde Joe se sincera con Noriko, siendo la primera y quizás única persona que supo en verdad como se sentía el protagonista cuándo luchaba en el ring pero quiero que los lean por su cuenta.





Durante el tiempo que creaba Saint Seiya, Ashita no Joe seguía en la mente de Kurumada inspirándole para darle vida a sus obras más reconocidas, no por nada en el manga Seiya y los demás tienen un carácter algo más rebelde con Saori, quién no la reconocen como la diosa Athena hasta más adelante.

Los santos de Athena arden sus cosmos hasta el infinito, luchando contra el mal que amenaza a la tierra hasta que se convierten en solo polvo de estrellas… similar a Joe quién ardió hasta convertirse en cenizas.


Contenido de referencia: 



Tengan una gran semana.

Se despide de ustedes, el escritor de pacotilla. 

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